LOS MOTEROS, UN ESPECTÁCULO
Tienen tendencia y afición los moteros a enredarse por las calles de
Cuenca. Para quienes no practicamos ese tipo de vehículos, siempre resulta un
espectáculo atrayente, sobre todo teniendo en cuenta que casi todos son ya
talluditos, gente madura, bien posicionada, que encuentra en las dos ruedas y
los potentes motores una eficaz vía de desahogo.
No si se las pérfidas cámaras
inspectoras y sancionadoras vuelcan también sus maléficos efectos sobre los
motores y sus vehículos pero a simple vista actúan con total tranquilidad:
entran cuando les parece, aparcan donde quieren y se van cuando lo consideran
oportuno.
Aquí están, a docenas, aparcados
hace unos días en la Plaza de la Ciudad de Ronda, a la vera del Museo de Arte
Abstracto y haciéndose fotos, como todos, en el puente de san Pablo. Un hermoso
espectáculo, sin duda.
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